Sardinas en lata Receta sencilla y deliciosa

Sardinas Enlatadas Receta Sencilla y Deliciosa

Las sardinas enlatadas son un alimento común en muchos países, especialmente en Europa y América Latina. Generalmente se elaboran con sardinas pequeñas, que se conservan en aceite, aceite de oliva o tomate.

Las sardinas son un tipo de pescado que pertenece a la familia de los clupeidos, a la que también pertenecen el arenque, las anchoas y el sábalo. Se encuentran en todo el mundo, pero son más comunes en las aguas templadas y frías del Atlántico y el Pacífico. Las sardinas generalmente se pescan en primavera y verano, cuando están más activas y gordas.

Las sardinas enlatadas son un alimento muy versátil y se pueden utilizar en muchas recetas diferentes. Se utilizan habitualmente en platos sencillos, como sándwiches o ensaladas, o en platos más elaborados, como sopas y guisos. Además, las sardinas enlatadas son una gran fuente de proteínas y omega-3, lo que las convierte en un alimento saludable y nutritivo.

Sardinas Enlatadas Receta Sencilla y Deliciosa

sardinas enlatadas

INGREDIENTES:

  • 1 cebolla grande picada
  • 3 dientes de ajo grandes, machacados
  • 2 vasos (tipo americano) de vinagre de alcohol blanco
  • 1 vaso (tipo americano) de aceite o aceite de oliva
  • 1 cucharada de sal
  • 1 cucharada de pasta de tomate (opcional)
  • 1 cucharada rasa de pimentón (opcional)
  • Finas hierbas u orégano al gusto
  • 2 kg de sardinas frescas, limpias sin cabeza ni cola

MODO DE PREPARO:

  1. Elige sardinas frescas y de calidad. Lávalas y quítales las escamas, si es necesario.
  2. Cortar las sardinas a lo largo del cuerpo y quitarles las espinas y las entrañas.
  3. Sazona las sardinas con sal y especias al gusto. Algunos condimentos comunes para las sardinas son la pimienta, el ajo, las hierbas frescas y el limón.
  4. Coloca las sardinas en un recipiente de cristal o lata de metal, cubriéndolas completamente con aceite de oliva o aceite. Asegúrese de que no haya aire en el embalaje.
  5. Cierra bien el paquete y colócalo en una cacerola con agua caliente. Deja la sartén a fuego lento unos 20 minutos, para que se cocinen las sardinas en aceite de oliva o aceite.
  6. Retira la sartén del fuego y déjala enfriar. Cuando las sardinas estén frías, colócalas en el frigorífico o en un lugar fresco y oscuro. Las sardinas enlatadas deberían durar varios meses si se conservan bien.
  7. Para servir, simplemente abre la lata o vaso y coloca las sardinas en un plato. Se pueden comer solos o utilizar en diversas recetas.

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