Controla el calor: Mantén el fuego a temperatura media-baja para evitar que la mezcla se queme o se pegue a la olla.
Revuelve con paciencia: El proceso de espesado requiere tiempo. Asegúrate de revolver de manera constante para obtener una textura uniforme y evitar que el azúcar se caramelice.
Prueba sabores adicionales: Si quieres darle un toque único, experimenta agregando una pizca de canela o ralladura de limón.
Variaciones de la Leche Condensada Casera
Versión sin lactosa: Sustituye la leche entera por leche de coco o almendra y ajusta el azúcar según el dulzor de la leche vegetal.
Leche condensada light: Usa leche descremada y edulcorante en lugar de azúcar para una versión más ligera.
Aromatizada: Agrega extracto de almendra, coco o incluso unas gotas de licor para darle un sabor distintivo a tu leche condensada.