Helado de Oreo Casero: Un Postre que Encantará a Todos
Modo de Preparo de Helado de Oreo Casero
Preparar el helado de Oreo casero es más sencillo de lo que imaginas. Sigue estos pasos:
- Tritura las galletas Oreo: Coloca las galletas en una bolsa de plástico y aplástalas ligeramente con un rodillo o tus manos. No tritures demasiado, ya que es ideal que queden pequeños trozos que se sientan al comer el helado.
- Mezcla los ingredientes líquidos: En un bol grande, combina la leche condensada, la crema de leche y la leche entera. Si deseas un toque extra de sabor, añade la vainilla. Mezcla bien hasta que todos los ingredientes estén completamente integrados.
- Añade las galletas trituradas: Incorpora las galletas Oreo a la mezcla líquida. Revuelve suavemente para asegurarte de que los trozos de galleta queden distribuidos de manera uniforme en toda la mezcla.
- Llena los saquitos de plástico: Con la ayuda de un embudo o una cuchara, llena los saquitos de plástico con la mezcla de helado de Oreo. Deja un pequeño espacio en la parte superior antes de atar los saquitos para que no se rompan al congelarse.
- Congela: Coloca los saquitos llenos en el congelador y déjalos enfriar durante al menos 4 horas o hasta que estén completamente congelados.
- Disfruta: Una vez que los helados estén listos, ¡es hora de disfrutarlos! Saca un chup chup de Oreo del congelador, corta la punta del saquito y saborea esta deliciosa y refrescante golosina.
