Bollitos de jamón y queso al horno: Un Tesoro Dorado del Horno Casero
Ingredientes de los Bollitos de jamón y queso al horno
Para la masa:
- 500 g de harina de trigo de fuerza (da estructura y suavidad a la masa).
- 10 g de sal (realza el sabor).
- 25 g de azúcar (ayuda al dorado y equilibra el sabor del jamón).
- 10 g de levadura seca (el alma del levado).
- 250 ml de leche tibia (activa la levadura y aporta humedad).
- 1 huevo (da color y suaviza la textura).
- 50 g de mantequilla a temperatura ambiente (aporta sabor y suavidad).
Para el relleno:
- 200 g de jamón cocido picado finamente (aporta un toque salado y sabroso).
- 150 g de queso mozzarella o gouda rallado (se derrite deliciosamente).
- Un toque de orégano o pimienta negra (opcional, para dar aroma).
Para el acabado:
- 1 huevo batido (para pincelar antes del horneado).
- Semillas de sésamo o amapola (opcional, para decorar y dar textura).
Cada ingrediente cumple un papel fundamental. La harina de fuerza da estructura a los bollitos; la mantequilla y el azúcar los hacen suaves y dorados; y la mezcla de jamón y queso logra un equilibrio perfecto entre salado y cremoso.
Modo de Preparo de los Bollitos de jamón y queso al horno
- Activar la levadura: Mezcla la leche tibia con el azúcar y la levadura. Deja reposar unos 10 minutos hasta que se forme espuma.
- Preparar la masa: En un bol grande, coloca la harina y la sal. Agrega el huevo, la mantequilla y la mezcla de levadura. Amasa durante unos 10-15 minutos hasta obtener una masa lisa y elástica.
- Primer levado: Cubre la masa con un paño húmedo y deja reposar en un lugar cálido por 1 hora o hasta que duplique su tamaño.
- Formar los bollitos: Divide la masa en porciones iguales (del tamaño de una pelota de golf). Aplana cada una y coloca en el centro una cucharada del relleno de jamón y queso. Cierra bien los bordes y forma una bolita.
- Segundo levado: Coloca los bollitos en una bandeja engrasada o con papel de horno, dejando espacio entre ellos. Cubre y deja reposar 30 minutos más.
- Hornear: Pincela cada bollito con huevo batido y espolvorea semillas si deseas. Hornea en horno precalentado a 180 °C durante 20-25 minutos o hasta que estén dorados.
- Servir: Deja enfriar unos minutos y disfruta de su interior tierno y su aroma irresistible.
Prepararlos es una experiencia relajante: el amasado se convierte en una danza de manos, el aroma del jamón despierta la nostalgia y el queso fundido es la recompensa final.
Dicas para Bollitos de jamón y queso al horno
El secreto de unos buenos bollitos de jamón y queso al horno está en la paciencia. No apresures el levado: cuanto más tiempo repose la masa, más esponjosos quedarán.
Otra clave es no excederse con el relleno. Aunque tentador, demasiado queso o jamón puede hacer que los bollitos se abran durante la cocción.
Si deseas un sabor más intenso, usa una mezcla de quesos, como mozzarella y cheddar. Y para un toque dorado espectacular, añade una pizca de azúcar al huevo batido antes de pincelar: se caramelizará en el horno y les dará un brillo irresistible.
Variaciones de los Bollitos de jamón y queso al horno
Existen infinitas formas de reinventar los bollitos de jamón y queso al horno. En algunas regiones se sustituyen el jamón y el queso por chorizo y pimientos, logrando un sabor más rústico y español.
También puedes hacer una versión dulce-salada, usando queso crema con un toque de miel o mostaza. O incluso, rellenarlos con espinacas y ricotta para una alternativa vegetariana igual de sabrosa.
Otra idea encantadora es prepararlos mini, ideales para picadas o fiestas infantiles. Pequeños bocaditos dorados que desaparecen en segundos y dejan a todos con ganas de más.
Información Nutricional de los Bollitos de jamón y queso al horno
Por cada porción (1 bollito de tamaño mediano), se estima:
- Calorías: 220 kcal
- Proteínas: 9 g
- Grasas: 10 g
- Carbohidratos: 22 g
- Calcio y fósforo gracias al queso; hierro y vitaminas del complejo B por la harina.
A pesar de ser un pan relleno, puede disfrutarse dentro de una dieta equilibrada si se acompaña con una ensalada o un jugo natural. Optar por jamón magro y queso bajo en grasa puede reducir las calorías sin sacrificar el sabor.
Conclusión
Los bollitos de jamón y queso al horno son mucho más que un simple pan relleno: son un símbolo de calidez, unión y tradición. Cada mordisco transporta a esos momentos familiares en los que el amor se hornea lentamente junto al aroma del pan recién hecho.
Anímate a prepararlos y verás cómo llenan tu casa de alegría y tu mesa de sonrisas.
Con cariño, tu Abuela 👵❤️